lunes, 5 de noviembre de 2007

MORDEDURAS DE PERROS

Lamentablemente, el día de ayer, se sepultó a la niña de un año y medio de edad, quien falleció a causa de las mordeduras de un perro Dogo argentino, en la ciudad de Villa Alemana.

Este hecho nos debiera llevar a la reflexión sobre la permisividad que tenemos al permitir la tenencia de perros potencialmente peligrosos en nuestros hogares, lo que significa que, sólo en la ciudad de Santiago, 30 personas son mordidas diariamente.

Este hecho reviste especial relevancia, pues la víctima fatal de este ataque fue una menor de edad, cuyos padres y familiares actuaron de manera permisiva, aceptando la estadía de este animal en el hogar, pese a que éste, ya se había ya comportado de manera agresiva, según lo informado a los medios de comunicación por algunos familiares.

Nuestras percepciones culturales arraigadas nos llevan a creer que los accidentes les ocurren a los demás y nunca, a nosotros o a nuestros seres queridos.

Mientras sigamos considerando la seguridad como un tema poco relevante al interior de nuestros hogares como en la vida laboral, y no focalicemos nuestro interés en el control de accidentes graves y fatales como el descrito, éstos seguirán ocurriendo, con las consecuencias por todos conocidas.